Con un gran entusiasmo los niños, niñas, adolescentes y adultos de los distintos parajes comenzaron sus clases de informática.
En grupos reducidos y respetando las normas correspondientes, muchas personas hoy reciben educación digital para aprovechar esta herramienta en favor del desarrollo personal y comunitario.
Todo desde su propia zona rural.
Seguimos apostando para que las comunidades rurales tengan más oportunidades

